El Parque Arqueológico del Tolmo de Minateda tiene una vocación de articular los elementos culturales y medioambientales de su entorno. Por ello, durante su visita, se atiende no sólo la exposición, musealización y explicación de los vestigios arqueológicos, sino también de todos aquellos aspectos medioambientales que en el Tolmo o desde el propio yacimiento son susceptibles de explicación y admiración.
Un complejo que incluye las pinturas rupestres de Minateda, declaradas Patrimonio de la Humanidad; permite la visión de la ubicación de los hitos medioambientales y geológicos más importantes de su entorno y facilita, mediante la inclusión de paneles y otros recursos didácticos, la comprensión de la flora, la fauna y la geología del entorno.
El núcleo del Parque lo constituye, no obstante, el yacimiento arqueológico de El Tolmo de Minateda, uno de los principales establecimientos antiguos en el Sureste peninsular, que muestra una larga ocupación, entre la Edad del Bronce y los inicios de la Islamización, aunque si incluimos las pinturas rupestres, al otro lado del valle, su ámbito cronológico alcanza el quinto milenio antes de Cristo, abarcando por tanto un periodo histórico de casi ocho mil años.
Forma parte, tras su puesta en funcionamiento, de la Red de Parques Arqueológicos de Castilla-La Mancha, una marca que pretende sobre todo ofrecer una imagen de credibilidad y calidad en la gestión y en los servicios ofrecidos al público visitante, comunes a todos los Parques. En la Red se pretende, además, desarrollar un modelo de gestión integral que abarque de forma coordinada los dos principales servicios que se deben asegurar para el futuro de estos Parques: la investigación y el uso público.